Como cada año, la Asociación de Padres Responsables Integradores de la persona con Discapacidad (APRID) lanzó su tradicional venta navideña de panes dulces y budines, una propuesta que combina solidaridad, tradición y un sabor inigualable.
En diálogo con la 102.5, María Inés Funes, directora de la institución, comentó más sobre esta iniciativa que busca llevar un mensaje de inclusión a toda la ciudad.
“Queremos que en cada mesa de nuestra ciudad haya algo para compartir con nosotros”, comentó Funes con entusiasmo, subrayando que los productos navideños no solo destacan por su exquisitez, sino porque son elaborados artesanalmente en el taller protegido de producción de APRID. “Es un taller modelo, perfectamente equipado, donde más de 18 operarios trabajan organizados como en cualquier panadería común, con días de producción, empaquetado y entrega”, explicó.
El taller protegido, liderado por la maestra panadera Alicia Gagliardi, es mucho más que un espacio de producción. Aquí, jóvenes con discapacidad desarrollan sus habilidades bajo un enfoque inclusivo y personalizado.
“Alicia dirige, capacita y acompaña a los jóvenes según sus capacidades. Este taller no solo les brinda una salida laboral, sino que también representa una herramienta de autonomía y dignidad para ellos”, señaló la directora.
Este año, APRID ofrece dos opciones de combos navideños. “Son productos naturales, sin conservantes, por eso están tan bien organizadas las fechas de elaboración y entrega”, puntualizó Funes. Las entregas están programadas para el 20 y el 23 de diciembre, justo a tiempo para la Nochebuena.
Los pedidos pueden realizarse a través de los teléfonos de APRID (15666427 y el que figura en su Instagram), o de forma presencial en Independencia 1457. Además, la Directora invitó a la comunidad a seguirlos en su cuenta de Instagram (@aprid_2024).
El 2024 no fue un año fácil para la Asociación, una institución de gestión privada que enfrenta enormes desafíos económicos. “A pesar de no recibir subvenciones estatales, municipales ni provinciales, seguimos adelante. Este tipo de campañas nos permite mantener el funcionamiento del taller y cubrir los altos costos diarios de la institución”, afirmó.
Sin embargo, las dificultades no disminuyeron el compromiso de APRID con las personas con discapacidad.
“Luchamos desde hace 30 años por sus derechos, para que las leyes que los protegen se cumplan realmente. Lo que se obtiene a cambio, en afecto y satisfacción, no tiene precio”, aseguró con emoción.
De cara al 2025, María Inés ratificó la misión de APRID de seguir trabajando por el bienestar de las personas con discapacidad. “Siempre estamos viendo qué es lo mejor para ellos y qué más podemos dar. Nuestro compromiso sigue intacto”, concluyó.
La invitación está hecha: participar de esta campaña navideña no solo asegura un producto delicioso en tu mesa, sino que también apoya una causa que transforma vidas.