El pasado 2 de Enero, el Grupo Scout San José Obrero celebró con entusiasmo su sexto aniversario de reapertura, un hito que marcó el regreso de esta importante institución juvenil a la comunidad.

Con una historia que comenzó el 25 de julio de 1973, el grupo vivió momentos difíciles, como su cierre en 1998 debido a la falta de adultos educadores. Sin embargo, gracias al esfuerzo y la dedicación de varios miembros, en 2018 comenzaron a trabajar en su reinvención, logrando su reapertura en 2019.

El espacio, cedido por la parroquia local, fue restaurado por los voluntarios, quienes, con sacrificio y amor, lo convirtieron nuevamente en un lugar de formación para los más jóvenes. En esta celebración, los miembros compartieron sus experiencias, destacando cómo el grupo no solo les brindó aventuras al aire libre, sino también una educación en valores que les permitió crecer como personas y líderes.

Desde su reapertura, el grupo mantiene una activa agenda de actividades, que incluye caminatas, bicicleteadas y proyectos de construcción, como un rancho hecho a partir de materiales encontrados durante sus salidas. Además, han realizado campamentos que los conectan con la naturaleza y les enseñan la importancia de la improvisación y la cooperación.

Uno de los mayores desafíos, sin embargo, sigue siendo la necesidad de más adultos que se sumen al voluntariado. Los miembros del grupo insisten en la importancia de la participación adulta para seguir ofreciendo este espacio de crecimiento a los niños y jóvenes, invitando a la comunidad a sumarse en 2025.