
En el año 1937 la Municipalidad de San Francisco instalo el primer teléfono público en lo que es la Plaza General Paz, en ese entonces se requería el servicio al placero para que habilite la llamada y cobre el arancel de la misma.
En la década del ’80, surgieron las cabinas telefónicas, aquellas que estaban distribuidas por las zonas de mayor influencia de la ciudad, esto en un momento cayó en desuso y debido a su costo de mantención, el gobierno de Calor Menen, decidió llevarlo a licitación y privatizarlo a través de TELECOM.
Nuestra ciudad llegó a tener más de 40 cabinas públicas distribuidas por todos los puntos cardinales, las primeras fueron de color gris y luego se modificaron al color azul. Hoy, no quedan cabinas en funcionamiento en las calles de nuestra ciudad, estas fueron removidas y llevadas al Servicio Penitenciario Nacional.
Radio Estación 102.5 salió a las calles de la ciudad y diálogo con diferentes ciudadanos, consultándoles sobre su recuerdo, utilización y puesta en funcionamiento nuevamente de las mismas.
Juan José (43 años): «Recuerdo que las cabinas fueron cambiando de color, que primero eran a monedas y luego funcionaban con fichas. Hoy, no servirían».
Raúl (56 años): «En ese momento eran muy importantes, me acuerdo de haberlas utilizado para comunicarme. Hoy, no hacen falta».
Hugo (66 años): «Las cabinas de nuestra ciudad nunca andaban, sé que hoy hay una en la Plaza General Paz. Hoy, no servirían porque las vandalizarían».
Liliana (58 años): «Nunca más se vieron esas cabinas, creo que al día de hoy no servirían por los avances tecnológicos que hemos tenido».
Patricia (44 años): «Me acuerdo de haberlas utilizado en mi juventud, esa era nuestra forma de comunicación anteriormente. Hoy, no vale la pena tenerlas».
Carina (50 años): «Las he visto, pero no las use, cuando era más chica veía a las personas que las usaban y que estaban distribuidas por el centro».
Emilio (37 años): «Yo creo que hoy estaría bueno tener estas cabinas, porque aunque no lo crean, hay personas que no tienen celular. Me parece que por las zonas aledañas de la ciudad servirían».
Cesar (38 años): «Las cabinas estaban muy buenas por qué podías hablar con todo el mundo, yo las utilizaría hoy en día, ya que no tengo teléfono».
A la hora de encuestar a la sociedad sanfrancisqueña vemos que la mayoría piensa que no servirían traerlas nuevamente a las calles, debido a que no se utilizarían. La minoría de los encuestados dice que sería algo bueno para la ciudad porque muchas personas no tienen celular.
Entre todos se destacó el mal funcionamiento de las mismas, como así también, el recuerdo de verlas descuidas y vandalizadas por los mismos que la utilizaban.