Marcos Quaglino, Secretario de la Seccional San Francisco de Asociación Bancaria, expresó su firme rechazo al decreto firmado por el presidente Javier Milei que convierte al Banco de la Nación Argentina en una sociedad anónima.

Esta medida, que toma por sorpresa al sector, generó una ola de reacciones entre gremios y actores políticos, quienes temen que se trate de un paso hacia la privatización de la entidad bancaria.

Quaglino recordó que, aunque en el pasado ya se había intentado privatizar el Banco Nación, esa iniciativa fue frenada gracias a una movilización que incluyó la recolección de más de un millón de firmas. Sin embargo, con el reciente decreto, el gobierno parece estar buscando reavivar esta discusión.

«A través de un trabajo que realizamos con los distintos gobernadores, diputados, en la vía judicial y gremial, donde juntamos más de un millón de firmas para rechazar la privatización del banco, fue sacado porque no contaban con los votos», afirmó Quaglino.

El representante destacó que el Banco de la Nación es una institución rentable que desempeña un papel esencial en la economía argentina, especialmente en localidades pequeñas y en sectores clave como la producción, la industria y el comercio. «El banco es rentable, el banco necesita plata de la Nación para su funcionamiento, inclusive dicho por los directores mismos donde aumentaron la capacidad de depósitos y de préstamos», señaló Quaglino.

Además, expresó preocupación por los posibles perjuicios que podría traer la privatización, especialmente para las pequeñas localidades donde el Banco Nación es el único proveedor de servicios financieros.

«Ante una posible venta de un banco privado, que es claro que los bancos privados no se instalan en estas pequeñas localidades, vemos que se correría un gran riesgo con perdidas en fuentes de trabajo y el cierre de sucursales», alertó.

La medida también generó inquietud entre las pymes y las entidades agropecuarias, quienes dependen del Banco Nación para su acceso a financiamiento. «Federación Agraria ya se manifestó con respecto a esto. Estamos recibiendo momento a momento de nuestra seccional, como a lo largo y ancho del país, adhesiones de los distintos empresarios, las cámaras, las pymes, donde rechazan la venta del Banco de la Nación«, indicó Quaglino.

El secretario general de la Asociación Bancaria, Sergio Palazzo, convocó a un plenario urgente para analizar la situación y planificar medidas de lucha.

«Nos mantenemos en estado de alerta y movilización. Vamos a empezar un proceso de lucha a través de la vía judicial, política y gremial en todo el país», afirmó el dirigente sindical.

El rechazo al decreto presidencial se extiende no solo entre los trabajadores bancarios, sino también entre sectores de la sociedad civil que temen que esta medida sea un primer paso hacia la venta total del banco, lo que podría afectar gravemente a las economías locales y la estabilidad del sistema financiero.