El Centro Cívico de San Francisco, uno de los espacios más representativos de la ciudad, tiene una rica historia que combina desarrollo urbano, tensiones políticas y decisiones arquitectónicas de gran impacto.
Arturo Bienedell, historiador y referente local, compartió en Radio Estación 102.5 un detallado recorrido por la transformación de este emblemático lugar, desde sus orígenes como estación ferroviaria hasta los planes de modernización anunciados recientemente para 2025.
“Este sector donde hoy está la Plaza Cívica era, originalmente, la estación ferroviaria que dio origen al pueblo de Estación San Francisco”, explicó Bienedell. Este espacio ocupaba varias manzanas y, desde principios del siglo XX, comenzó a generar problemas de tránsito entre el norte y el sur de la ciudad. En 1915, se inauguró un puente a la altura del actual Hotel Libertador, pero no fue suficiente para aliviar las dificultades. “La idea de retirar la estación ferroviaria fue imposible en ese momento porque las empresas eran extranjeras, mayormente inglesas, y las decisiones se tomaban en Londres”, señaló el historiador.
No fue sino hasta la estatización de los ferrocarriles en 1947, durante el gobierno de Juan Domingo Perón, que el proyecto empezó a tomar forma. Según Bienedell, en 1950 se logró el permiso para trasladar la estación, dejando un terreno baldío que durante una década sirvió para circos, espectáculos y actividades deportivas.
Fue recién en 1960 cuando el gobierno nacional cedió el espacio a la municipalidad, marcando el inicio del desarrollo del actual centro cívico.
En 1960, el intendente José Guillermo Peretti convocó a un concurso de ideas urbanísticas. “Participaron grandes estudios de arquitectura, especialmente de Córdoba, y el proyecto ganador delineó lo que conocemos hoy como el centro cívico”, detalló Bienedell. Este diseño incluía una plaza central, edificios públicos, bancos, escuelas y hasta un teatro.
Según el historiador, «todas las calles fueron pensadas para estar abiertas, como Córdoba, Pellegrini y otras conexiones importantes, pero no todas se concretaron debido a costos elevados y cambios en las prioridades municipales”.
El proyecto también contó con la participación del arquitecto local Carlos Magistrello, a quien Bienedell recordó con afecto. “Magistrello, nuestro primer arquitecto sanfrancisqueño, tuvo un rol clave en vincular las ideas con la municipalidad y en la coordinación de los trabajos.”
En la actualidad, la Plaza Cívica se encuentra nuevamente en el centro del debate. El proyecto anunciado para 2025 propone abrir una calle para agilizar la circulación vehicular y realizar ajustes que modernicen el espacio. Aunque Bienedell destacó que “no se va a sacrificar espacio verde”, algunas voces ya manifestaron su preocupación por el impacto en el entorno. “Es importante aclarar que el proyecto original del centro cívico siempre contempló un edificio en el lugar donde ahora está la Tecnoteca”, afirmó, añadiendo que esta construcción, realizada en 2010, respeta las ideas iniciales de los urbanistas.
El historiador también hizo énfasis en que la apertura de calles es un tema recurrente en la ciudad desde hace más de 80 años. “Hace décadas que se habla de esto. Hoy por hoy, ya está todo construido y es imposible abrir más calles sin generar problemas mayores.”
A pesar de las polémicas, Bienedell considera que las actualizaciones son necesarias. “Es como cuando cambiás los muebles de tu casa; parece renovado. Este tipo de ayornamiento urbano moderniza y da nueva vida a la ciudad.”
Además, destacó que las obras agregarán espacios verdes en áreas clave como el monumento a San Martín y la fuente, lo que podría equilibrar cualquier preocupación ambiental.
Finalmente, Bienedell expresó su esperanza en que los cambios propuestos respeten la esencia histórica del lugar y contribuyan a mejorar la calidad de vida en San Francisco: “Es un gusto poder compartir esta historia y ayudar a entender cómo llegamos a lo que tenemos hoy. Cada uno tiene sus opiniones, pero aquí está el trasfondo de décadas de trabajo y planificación.”
Modernizarán la Plaza Cívica: cómo será la obra y qué implica para la ciudad