Provinciales

Misterioso financiamiento de la campaña de Tomás Méndez

Méndez ha ingresado a la política en punta de pie, prevenido por las graves denuncias formuladas por el penalista Marcelo Touriño y difundidas a través de youtube sobre el uso y abuso de cámaras ocultas para grabar a sus entrevistados. Sin embargo, la semana pasada entregó noticias sobre causas judiciales en su contra, promovidas de oficio y alentadas por el mencionado letrado.

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El periodismo ha sido con frecuencia una de las canteras a la que ha recurrido el sistema político, como anabólico, incluso, ante la sostenida caída de credibilidad de los dirigentes. En el ciclo institucional que comenzó en 1983 se ha revelado, en Córdoba y el país, como una alternativa creciente de los partidos para paliar su crisis, desplegándose esta táctica no sólo en la captación de cuadros de los medios, sino también del mundo del espectáculo (Cacho Buenaventura es el ejemplo más reciente).
En Córdoba, esta recurrencia ha sido, no obstante, a través de estructuras partidarias ya consolidadas o nuevas, como el peronismo y el radicalismo, en el primer caso, o el Frente Cívico, en la segunda alternativa. Pero se ha repetido con dos invariables: colocar a estos personajes como actores de reparto –listas legislativas o funcionarios de segundo nivel hacia abajo- y, como decíamos, bajo el paraguas de un partido que los excede en sus planes y objetivos.
La aparición para las elecciones municipales del 13 de septiembre del Movimiento ADN –la “cobertura” partidaria aquí es solo el préstamo del sello de Apec- liderado por el periodista Tomás Méndez es, en cambio, un experimento absolutamente inédito. Por sus objetivos de alzada (competir por el segundo cargo político de la provincia) y por colocar en buena parte de los lugares más expectables de la boleta de concejales a personas directa o indirectamente involucrados en el programa que da nombre de fantasía a esta oferta electoral.
No es lo único que llama la atención del Movimiento ADN. En lo que va de la campaña electoral, esta novísima organización se ha revelado potente publicitariamente, al punto de ser, junto al radicalismo que gobierna la ciudad, como la fuerza más presente en la propaganda en vía pública, radio y TV y en Internet. Esta preponderancia ha llevado a varios expertos en publicidad a afirmar que en lo que va de la campaña, que aún le falta las dos últimas y más intensas semanas, los gastos en publicidad han estado por encima de los $ 10 millones.
Méndez ha ingresado a la política en punta de pie, prevenido por las graves denuncias formuladas por el penalista Marcelo Touriño y difundidas a través de youtube sobre el uso y abuso de cámaras ocultas para grabar a sus entrevistados. Sin embargo, la semana pasada entregó noticias sobre causas judiciales en su contra, promovidas de oficio y alentadas por el mencionado letrado –se constituyó en parte querellante. Fue cuando el juez federal Ricardo Bustos Fierro ordenó el archivo de parte de la investigación y el giro del tramo restante a la Justicia provincial. Las dos decisiones fueron recurridas por el abogado, por lo que la investigación volverá a latir probablemente antes del 13 de septiembre.
Más allá de los detalles, las grabaciones del propio Méndez a entrevistados suyos a las que Touriño tuvo acceso y después subió a Internet, expone un modus operandi por lo menos polémico de este periodista, ya que la mayoría de los videos sino todos –seis en total- sugieren con llamativa nitidez que el ex periodista de los SRT utilizaba esas grabaciones para obtener franquicias publicitarias. Para describir este método en forma breve, Méndez utilizaba la figura del “periodista encubierto” para obtener información comprometedora sobre el funcionario o empresario que tenía sentado frente a su cámara oculta miniatura escondida en un lugar no advertible para su contertulio de ocasión.
Si bien Méndez ha declarado que los recursos para su muy bien financiada campaña publicitaria están asentados en escribanía pública, no se puede saber a ciencia cierta su origen. Él, como periodista, ha sido sistemáticamente escéptico sobre la información en on que le entregaban sus interlocutores, por lo que debe conceder que ahora, devenido en político, le caben sus generales de la ley.
En el mundillo político y publicitario se manejan dos hipótesis sobre el origen de los fondos. Uno, que son aportes provenientes del sciolismo que espera de él su apoyo para la campaña presidencial que tendrá, tras las PASO del 9 de agosto, su segundo capítulo el 25 de octubre. La otra es que en buena parte son recursos propios amasados en su paso por las pantallas de Canal 10 durante varios años.

Diario Alfil

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