Días atrás informábamos sobre un accidente en la Autovía de la RN 19, a la altura del kilómetro 127, en jurisdicción de Frontera, donde un vehículo en el que se trasladaban cuatro jóvenes colisionó con un caballo suelto.
Pese a la intervención inicial de las autoridades, los vecinos de la zona denuncian que los animales continúan sueltos, lo que supone un riesgo constante para los conductores que circulan por esa vía.
El siniestro ocurrió cuando un automóvil conducido por un joven de 21 años, acompañado por tres mujeres de 18, 20 y 21 años, impactó con un equino que apareció repentinamente sobre la calzada. Afortunadamente, ninguno de los ocupantes del vehículo resultó herido, y el equino fue examinado por personal de la Dirección General de Seguridad Rural. Según fuentes policiales, el conductor relató que al llegar al mencionado kilómetro, un caballo emergió desde el norte y chocó contra el frente del automóvil.
Tras el accidente, personal de la Comisaría 6° de Frontera se hizo presente en el lugar, corroborando que los ocupantes del vehículo no necesitaron asistencia médica. Sin embargo, la situación no terminó ahí. Aunque se dio aviso al fiscal en turno de Rafaela y se cumplió con el protocolo, la preocupación persiste.
Caballos sueltos, un peligro latente
A pesar de la intervención de la Guardia de Seguridad Rural «Los Pumas» de Frontera y el aviso a las autoridades judiciales, los vecinos aseguran que los caballos siguen sueltos en la autovía, lo que representa un riesgo significativo para quienes transitan por la zona.
«La situación sigue igual», expresan con preocupación los residentes, quienes advierten que la falta de acción puede derivar en una tragedia si no se toman medidas más contundentes. La comunidad solicita una intervención efectiva, tanto de la Guardia Rural como del personal municipal de Frontera, para controlar a los animales y evitar futuros accidentes que puedan tener consecuencias más graves.
Los vecinos insisten en la necesidad de soluciones rápidas y definitivas para evitar nuevos siniestros en una ruta que, de no ser atendida, podría convertirse en escenario de tragedias evitables.