
Olga Baudracco expresó su consternación y sensación de vulnerabilidad tras este hecho delictivo: «Uno se siente ultrajado y solo, es una invasión a tu privacidad y a tu hogar. Es una sensación de impotencia total».
La propietaria de la vivienda realizó la denuncia correspondiente en la Comisaría local, mientras que vecinos del barrio manifestaron su preocupación por la creciente ola de robos domiciliarios en la zona.
Los malvivientes ingresaron por la puerta principal, forzándola, y comenzaron a revolver todo en busca de objetos de valor. Rompieron muebles, revolvieron cajones y hasta se llevaron algunas joyas, dinero en efectivo y electrodomésticos.