El subsecretario de Políticas de Sanidad de Frontera, Fabio Milanesio, explicó detalles de la campaña de vacunación contra el dengue en la provincia de Santa Fe, destacando el esfuerzo en abordar la problemática de manera progresiva y focalizada.
“Esta campaña comenzó hace 18 meses con etapas específicas. Primero vacunamos a niños y adolescentes de 15 a 19 años de los departamentos más afectados, como el norte de la provincia, barrios de Santa Fe, Cañada y Rafaela”, explicó Milanesio. Posteriormente, se incluyó al personal de salud, seguridad y bomberos, y actualmente la vacunación se dirige a quienes ya tuvieron dengue.
Un aspecto clave de la estrategia es identificar a personas que tuvieron dengue pero no figuran en los sistemas informáticos oficiales, como el Sistema Integrado Sanitario (SISA).
“Hay gente que fue diagnosticada en laboratorios privados o simplemente por nexo epidemiológico. Queremos que estas personas se acerquen a los centros de salud más cercanos para registrarlas”, indicó.
Milanesio enfatizó que quienes hayan tenido dengue pueden acercarse de lunes a viernes, de 8 a 12 horas, a los centros de salud Francucci, San Roque, Estación Frontera o Villani.
“No importa si no tienen certificado médico o análisis de laboratorio. Lo importante es empadronarlos para garantizarles su vacuna cuando lleguen las dosis necesarias”, subrayó.
Además de la vacunación, la eliminación de criaderos de mosquitos es una prioridad. “Podemos fumigar, pero si no eliminamos los criaderos, el mosquito sigue reproduciéndose. Este mosquito, el Aedes aegypti, ya es un habitante doméstico; vive dentro de nuestras casas porque necesita alimentarse del ser humano. Eliminar cualquier recipiente con agua acumulada es el 90% de la prevención”, explicó Milanesio.
La municipalidad de Frontera también implementó innovaciones tecnológicas, como una línea telefónica automatizada que responde consultas las 24 horas al (3564) 47-4687. “Está dando muy buenos resultados, con más de 100 consultas diarias sobre prevención, síntomas y medidas a tomar”, destacó.
Finalmente, el subsecretario llamó a reforzar la conciencia comunitaria: “El descacharreo y el cuidado en cada hogar son esenciales. Si no hay mosquitos, no hay dengue. Es un trabajo que empieza con cada uno de nosotros”, concluyó.