El pasado viernes por la noche se compartió una cena de encuentro y cierre del año 2022 en el Refugio Nocturno para personas en situación de calle. De la misma participaron el secretario y la directora general de Políticas Sociales, Mauricio Vaschetto y Clauda Lenis respectivamente, personal, voluntarios de las distintas iglesias y personas que se encontraban en el refugio.
Vale recordar que este espacio abrió sus puertas el pasado 29 de junio en calle Dante Alighieri 1590, tratándose de una de las políticas públicas más destacadas implementadas este año en materia social.
“La idea fue compartir un grato momento junto al personal y al grupo de voluntarios de las iglesias que durante estos meses acompañaron de diferentes maneras la vida de las personas que se reciben y se asisten al lugar”, comentó el secretario municipal de Políticas Sociales, Mauricio Vaschetto, y agregó: “En cuanto al trabajo realizado y al espíritu por el cual se creó el refugio, podemos decir que fue positivo ya que más de 85 personas utilizaron este espacio donde se les brindó un lugar para dormir, comer, se les proveyó de elementos de higiene personal y pudieron compartir momentos de esparcimiento”.
El funcionario destacó asimismo que “esta política pública es fruto del trabajo asociado entre el municipio y las iglesias católicas y evangélicas, sin las cuales no lo hubiéramos podido llevar a cabo. Aquí cumplió también un rol fundamental el Consejo Interreligioso Social creado este año”.
“En ese sentido- continuó Vaschetto- me gustaría agradecer también al Obispo Diocesano Sergio Buenanueva ya que fue la primera persona con la que nos reunimos para comenzar a darle forma a esta iniciativa y además nos cedió el espacio físico donde funcionaba Cáritas para poder instalar el Refugio Nocturno para personas en situación de calle”.
En tanto, la directora general de Políticas Sociales, Claudia Lenis, remarcó la decisión del intendente Damián Bernarte de crear este año también la Secretaría de Políticas Sociales “con la visión de profundizar el trabajo y la presencia del estado municipal en materia social. Con la apertura de este espacio de contención y protección para personas que subsisten en un grado de vulnerabilidad muy grande encontrándose en situación de calle, se cumplió con el objetivo de brindar por primera vez en la ciudad un lugar seguro donde encuentran una cama, baño, ropa de cama, elementos de higiene personal, cena y desayuno”.
Por último, ambos coincidieron en manifestar: “Deseamos que el refugio sea además un espacio de esperanza, donde las personas que allí ingresan por haber roto un vínculo ya sea con la sociedad o con su familia, que han perdido oportunidades laborales o se encuentren atravesados por un problema de adicción, puedan volver a recomponer esos vínculos a mediano o largo plazo y salgan de esa situación en la que están. Como siempre lo expresa Damián (Bernarte) el objetivo es que en algún momento este refugio deje de funcionar ya que significaría que no existen vecinos en situación de calle, pero mientras tanto sabemos que es algo muy necesario ya que sin el mismo estas personas estarían desprotegidas en la calle”.