El joven músico local compartió detalles de su mundo musical, desde sus comienzos hasta sus futuras metas.

En diálogo con Radio Estación 102.5, Nicolás Ludueña, comparte cómo comenzó su carrera.  “Primero empezó así, jodiendo en la escuela con mis compañeros. Nos poníamos a cantar un rato, siempre me gustó la música, pero nunca lo había demostrado de forma profesional”.

Con tan solo 18 años, Nicolás decidió dar un paso decisivo en su vida: “En 2019, un mes antes de cumplir los 18, gracias a un amigo, decidí ir a una academia de canto. Buscaba clases y, justo vi a Sofi en un show que hizo. Me gustó mucho y la contacté. Empecé las clases y, en diciembre, ya me había presentado en una peña”.

Para él, ese primer paso fue revelador: “En un momento, me di cuenta de que quería seguir y seguir para adelante”.

Sin embargo, no todo fue fácil. La pandemia presentó un desafío que puso a prueba su compromiso. “Las clases virtuales eran intuitivas y nuevas, pero no se comparaban con las presenciales”, recordó.

“Después de la pandemia, volvimos a retomar y, en cinco años, he logrado mucho”.

La voz de Nicolás encontró un hogar en el cuarteto, pero también se aventuró en el mundo de la cumbia. “Canto cuarteto, pero hoy en día también le estoy metiendo bastante cumbia. Es un desafío salir del cuarteto; son dos cosas distintas, pero es lo que el repertorio a veces me pide”, explica. Este enfoque versátil enriqueció su experiencia musical.

Enfatiza la importancia del trabajo duro y el compromiso: “El talento y la disciplina superan al talento por sí solos”.

A lo largo de su carrera, Nicolás aprendó la importancia de la conexión en la música. “Cantar con alguien nuevo puede ser difícil, pero he tenido experiencias muy buenas. La música es para unir, no para competir”, reflexiona. “A veces pasa que no conoces a una persona y, al instante, te conectas en el escenario”.

Nicolás tiene claro que la música también es una forma de terapia. “La música me hace remontar, me salva. Es más que estar en el escenario; es un proceso de crecimiento personal y artístico”. Para él, cada show es una oportunidad para brillar y disfrutar.

“Lo importante es superar las dificultades y seguir creando”.

En cuanto al futuro, Nicolás muestra interés en explorar nuevos géneros. “Sí, probaría con cumbia o melodías románticas. La música es amplia y siempre hay espacio para experimentar”. Su pasión y dedicación lo llevaron a formar parte de una banda, donde se siente “feliz y libre”.

Este joven artista, con una voz que resuena en los corazones de quienes lo escuchan, está listo para seguir dejando su huella en la música. “Lo importante no es solo lo que logras, sino lo que superas en el camino”, concluye Nicolás con una sonrisa. Con un talento en ascenso y una actitud positiva, su viaje musical apenas comienza.