En la mañana de Radio Estación 102.5 hablamos con la abuela del joven que se encuentra internado tras haberse atragantado con comida, Nilda Vega.

«Todo empezó como un juego de niños.», comenzó.

Los nietos de Vega se encontraban cenando hamburguesas y se les ocurrió, sin medir el peligro, competir por ver quién comía más rápido. Entre las risas del juego, la menor se da cuenta que su hermano mayor comienza a atragantarse hasta que cae desvanecido al suelo. Inmediatamente la pequeña de 9 años aviso a sus padres, quienes se encontraban fuera del hogar cuando esto sucedió, mientras que otro de sus hermanos sale de la vivienda para pedir ayuda.

«Le hicieron RCP y pudieron reanimarlo», explicó Nilda al contar cómo un vecino y los bomberos que llegaron después asistieron a su nieto para luego ser tralado al sanatorio. Ademas agregó «En ese momento estaba bien, reacciono y respondió a las preguntas que le hacían».

Cuando esta familia pensó que el calvario había pasado, sucedió lo peor. En cuestión de minutos, los médicos comenzaron a ver que el joven no saturaba bien y al ver que comenzó a escupir sangre, decidieron derivarlo al Hospital e intubarlo.

«El dolor comenzó cuando los doctores no nos dieron muchas esperanzas», recalcó Vega.

Si bien las primeras horas son cruciales, el día de ayer las respuestas en el parte medico fueron alentadoras.

«Como familia es un momento muy duro pero tenemos que tener mucha fé», concluyó Nilda al tiempo en que tambien agradeció por toda la contención que recibieron por parte de la ciudad.

El joven de 17 años se encuentra en coma inducido en el Hospital J. B. Iturraspe pero evoluciona favorablemente.