Cerca de 35 millones de argentinos se volcarán a las urnas este domingo para elegir a los candidatos presidenciales de octubre en un contexto económico desfavorable caracterizado por alta inflación, pérdida de poder adquisitivo de los ingresos y un nivel de actividad económica en pleno declive.
Este escenario tiene como marco macroeconómico un elevado déficit fiscal que demanda asistencia del Banco Central para su financiamiento, con la consecuente pérdida de reservas, que impone un cepo cambiario con múltiples precios para el dólar y que a su vez genera un mercado paralelo que acompaña la suba de precios general de la economía.
A esto debe sumarse un cierre total de los mercados de deuda voluntario y un acuerdo incumplido con el Fondo Monetario Internacional (FMI) lo cual mantiene al país sin financiamiento.
Con este panorama, la pobreza creció en los últimos meses y alcanza a 18 millones de argentinos, según estadísticas oficiales.
INFLACIÓN
En la lista de problemas económicos, la creciente inflación está en el podio. Según el Indec en junio, y luego de un alza de 6% -último dato disponible-, la variación de precios interanual trepó a 115,6%, mientras que la acumulada en el primer semestre alcanzó a 50,6%.
La conducción del Indec decidió modificar el calendario de difusión y las cifras de julio se conocerán el próximo martes 15 de agosto. Por su parte, el Banco Central también postergó para esa fecha la publicación del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que pronostica el comportamiento futuro de una serie de variables económicas.
Las estimaciones privadas estiman que en julio la inflación volvió a la zona de 7%. Por otro lado, las últimas medidas de política económica, e incluso los datos que trascendieron del acuerdo con el FMI, permiten proyectar una aceleración de la inflación para la última parte del año que la ubicaría cerca de un 140%.
SALARIOS
Con una inflación creciente los salarios vienen perdiendo poder adquisitivo mes a mes. El último informe al respecto del Indec precisó que en el primer semestre los salarios formales aumentaron 48,4%, dos puntos por debajo de la inflación. Pero al discriminar por sector se observa que en el sector privado subieron 47,3%, mientras que en el sector público aumentaron 50,2%, con lo cual lo estatales cedieron menos terreno.
Peor es el caso de los trabajadores informales que tuvieron una recomposición de 41%, casi 10 puntos por debajo de la inflación.
Ante esta situación, en el último tramo de la campaña el oficialismo amagó con otorgar un aumento de suma fija por decreto, medida que es resistida por una parte de las centrales de trabajadores y por el sector empresario que pretenden que todos los ajustes se realicen por paritarias.
POBREZA E INDIGENCIA
Los últimos datos oficiales muestran que la pobreza afecta a casi el 39 % de la población. En tanto la indigencia alcanza al 9% de los argentinos. Esto implica que cerca de 18 millones de argentinos no alcanzan a cubrir sus necesidades básicas. La próxima medición del Indec se dará a conocer a mediados de septiembre a pocas semanas de la elección presidencial.
La caída del poder adquisitivo de los ingresos provocó un fenómeno particular dado que una buena porción de trabajadores con salarios formales no llegan a cubrir un conjunto de bienes y servicios esenciales y caen en la pobreza.
De acuerdo a los datos oficiales una familia tipo debió reunir en junio un mínimo de $ 232.426 para superar el umbral de la pobreza y $ 104.227 para no caer en la indigencia.
EMPLEO
Los datos de empleo son los únicos en los que el Gobierno puede mostrar un saldo aceptable ya que la desocupación se ubicó en 6,9% al cierre del primer trimestre del año, manteniéndose respecto al inicio de 2022.
No obstante, cabe aclarar que ante la caída de la actividad económica la situación puede cambiar cuando se difunda el mes próximo el resultado del segundo trimestre.
El deterioro se observa en la calidad del trabajo ya que el 36% de la fuerza laboral lo hace de manera informal, con lo cual no accede a derechos sociales ni aportes jubilatorios.
DÓLAR
El dólar informal registró una fuerte escalada en las últimas semanas, producto de la cobertura ante la incertidumbre que genera el acto eleccionario. Al cierre del viernes 11 alcanzó un valor de $ 605, lo que implica un alza de 76% en lo que va del año.
En tanto, la cotización oficial llegó a $ 300, que representa un alza de 61% en el acumulado desde el 1° de enero.
Dada la decisión política de no provocar una devaluación generalizada en la Argentina conviven cerca de 20 tipos de cambio diferentes que en gran parte traban la actividad económica.
Los dólares bursátiles a los que se accede libremente tienen un valor de $ 541 el MEP y $ 601 el Contado con Liquidación.
ACTIVIDAD ECONÓMICA
La actividad económica llega al acto eleccionario en plena recesión. El último dato disponible del Indec refiere a mayo cuando se observó una caída interanual de 5,5%, que se suma al 4,4% que se había producido en abril. Son los primeros indicadores que confirman las proyecciones de una caída anual del orden de 3%.
Los indicadores preliminares de junio abonan esta previsión ya que la industria manufacturera registró una baja de 2,3%, mientras que la construcción se retrajo 2,8%.
RESERVAS
Las reservas brutas internacionales cayeron a un mínimo de $ 23.760 millones. Durante el Gobierno de Alberto Fernández se produjo una pérdida de US$ 20 mil millones de dólares. En tanto, las reservas netas son negativas en el orden de los US$ 10 mil millones de dólares.
Dólar
El dólar blue subió $55 en los 10 días previos a las elecciones presidenciales
DEUDA
La deuda externa bruta total del Estado argentino asciende a US$ 403.809 millones. Durante el Gobierno de Alberto Fernández se incrementó en US$ 79.440 millones.
FMI
El acuerdo con el FMI se renegoció luego de una serie de incumplimientos en 2023 y se aguarda la aprobación del Directorio del organismo que habilitaría un desembolso de US$ 7.500 millones para el fortalecimiento de las reservas.